En el anterior post, se indicaba que, por las características tecnológicas de los coches eléctricos, los procesos de mantenimiento y reparación de estos vehículos cambiarían completamente. En el post de hoy hablaremos sobre ello.
El mantenimiento del coche eléctrico: un proceso más barato
Una de las características más destacables del mantenimiento del coche eléctrico es que es más barato que el del motor de combustión. Este último es mucho más complejo, dado que hay más piezas e instalaciones a mantener cada cierto tiempo.
En la tecnología del coche eléctrico, por ejemplo, no encontramos un sistema de distribución, por lo que no existe una correa de distribución que haya que cambiar, y cuya avería es de la más caras con las que nos podemos encontrar.
Evidentemente, no hay combustible, y por tanto eso significa la supresión de bombas y filtros necesarios. También desaparece el sistema de admisión de aire, el hecho de que no haya combustible supone la ausencia de tubo de escape, y por ello de catalizadores y filtros de partículas. Tampoco hay cambio de aceite y, según qué clase de coches eléctricos, también desaparece el embrague.
Entonces, ¿no hay mantenimiento?
Sí, solo que no es tan intensivo y frecuente como el de los vehículos a motor de combustión.
Por tener una idea simple, un coche eléctrico se compone de las siguientes partes:
- Motor o motores eléctricos
- Los transformadores de Corriente Continua a Corriente Alterna
- El pack de baterías
- El cargador de abordo
Cada uno de estos componentes funcionan a una temperatura óptima, y esto significa que debe existir un sistema de refrigeración que permita mantener dichas temperaturas, con sus respectivas bombas eléctricas. Esto último, obviamente, requiere de un proceso de mantenimiento. También hay que hacer una revisión de mantenimiento de los frenos, los neumáticos, la dirección, o la caja de cambios (en su caso).
Pero en lo que respecta a las tecnologías puramente del coche eléctrico, apenas existe un mantenimiento como tal. Del motor eléctrico, básicamente serían los rodamientos, dado que, si este se avería, no quedaría otra que hacer un cambio completo del motor.
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El proceso de reparación del coche eléctrico
La reparación del coche eléctrico no es un proceso similar al de los que funcionan con motor a combustión. Sobre todo, en la etapa inicial, donde los operarios tienen que llevar a cabo una serie de medidas de prevención relacionadas con la corriente eléctrica.
Para empezar, es obligatorio que haya, mínimo, 2 operarios con sus EPIs correspondientes que lleven a cabo, para empezar, la desconexión física del circuito eléctrico con el pack de baterías.
Entre las EPIs que deberían llevar los operarios se encuentran:
En caso de choque eléctrico:
- Guantes de protección eléctrica UNE-EN 60903 (Clase 00 o Clase 0)
- Casco aislante de electricidad UNE-EN 50365
- Mono protector contra descargas eléctricas UNE-EN 50286
- Calzado aislante UNE-EM 50321
En caso de arco eléctrico:
- Pantalla o máscara facial EN 160 / EN 170
- Guantes de protección eléctrica UNE-EN 61482-1-2
- Mono protector UNE-EN 61482-1-1
Después hay que asegurarse de que la llave de contacto está desconectada para evitar circulación de corriente alterna. Lo mismo con los con el conector eléctrico principal de la batería, verificando a su vez la ausencia de electricidad entre bornes del extremo del conector de estas.
Por último, seguramente os sea familiar los casos de incendios de baterías de ion-litio. Esto se puede dar, y evidentemente se requiere de un medio de extinción del fuego generado, si se da. Pero hay que tener en cuenta que el fuego generado por este tipo de baterías está clasificado como fuego de clase D.
En breve, que se genera una explosión si entra en contacto con el agua. De modo que se requiere un extintor tipo 507 que sirve para extinguir estas clases de fuegos.
¿Qué se repara en un vehículo eléctrico?
Packs de baterías: No se reparan. En todo caso, se permite la sustitución de módulos completos. No se permite la reparación por los riesgos que entrañan la manipulación de las celdas de litio, así como su inviabilidad económica.
Motor/es eléctrico/s: Se consideran como cajas negras; es decir, como sucede con las cajas de cambios. En caso de avería, no se lleva a cabo una operación de despiece, sino que se cambia directamente. Esto pasa también con los inverter y con los cargadores on-board.
Por otra, parte, en lo que a los sistemas de diagnosis se refieren, estos siguen los mismos procedimientos y protocolo que se dan en los vehículos de combustión. Esto quiere decir que se puede establecer comunicación bidireccional con todas las unidades de control del vehículo: motores eléctricos, inverters, cargador y pack de baterías.
En cuanto al último punto, el operario podrá ver cada uno de los módulos que conforman el pack de baterías, lo que supone poder ver el voltaje medio de cada uno de dichos módulos, así como la medida de la resistencia interna de cada uno de estos.
En el próximo post, veremos cómo os podemos ayudar desde EGA Master, qué herramientas y medios podemos poner a vuestra disponibilidad para las operaciones pertinentes del vehículo eléctrico.
Siguiente post:
Fuente: Soluciones del Grupo EGA para el coche eléctrico
Claves en el mantenimiento y reparación de un vehículo eléctrico - Ing. David Alonso Lorenzo